EMBOLICA QUE FA FORT / Remake
31/03/2021
Durante unos días el debate de investidura en el Parlament de Catalunya ha tenido ocupado al personal, ya que la liga de fútbol está de baja temporal y la pandemia limita otros eventos. Se trataba de comprobar si la mayoría independentista podía ponerse de acuerdo en la elección de un candidato de consenso. Dado que Esquerra Republicana de Catalunya tenía un parlamentario más que Junts per Catalunya, les correspondía a ellos proponerlo. Y así ha sido. El candidato nominado (Pere Aragonés García) no ha alcanzado los votos necesarios, ya que los parlamentarios de JuntsxCat se han abstenido.
Y ha sido entonces cuando se ha producido una explosión controlada, en la que los chicos y chicas de ERC, junto a su corte mediática, han expresado su triste amargura (siempre controlada) ante la “traición” de sus colegas independentistas. Dramas aparte, tendremos que esperar un par de meses para ver qué solución se alcanza.
En cualquier caso, el partido que lidera con mano férrea mossèn Junqueras tiene que hacer un análisis en profundidad (de aquellos que recomendaban en los “ejercicios espirituales”) si quiere comprender lo que está ocurriendo. Vamos a darles unas pistas, por si les sirve de ayuda:
- Catalunya es un país ocupado política y militarmente. Lleva siglos en esta situación. Todo necesita el consentimiento del virrey de turno.
- La “España de las autonomías” es un invento grosero en términos organizativos. Se creó para impedir la reclamación de los derechos históricos de Catalunya y Euzkadi.
- Los parlamentos autonómicos son parlamentos de feria. Sus decisiones pueden ser revocadas por cualquiera de las múltiples instituciones del Estado, siempre prestas a intervenir.
- El “poder ejecutivo” (el govern de la Generalitat) solo sirve para gestionar el día a día del territorio catalán, siempre y cuando no se aparte ni un ápice del guion escrito por la “autoridad competente” de la capital del reino.
- Ese gobierno es responsable del gasto público pero no de los ingresos, ya que la máquina recaudadora del Estado se queda con los impuestos pagados por los contribuyentes catalanes y luego transfiere a la Generalitat lo que considera pertinente. Y a esto le llaman cínicamente sistema de “financiación”. Te “financian” con parte del dinero que antes te han hurtado.
- Una notable mayoría de la población que vive y trabaja en Catalunya no es consciente de lo anterior y es por ello que presenta sus quejas a la Generalitat, como si ésta pudiera decidir algo para aliviarlas. Se reclama al interlocutor equivocado, con el auxilio de la “izquierda institucional” (Socialistas, Catalunya en Comú, Podem y otras especies menores), que conociendo la raíz del problema lo ocultan en beneficio propio, lo que pone de manifiesto su baja catadura moral.
- En paralelo el Estado se hace el sordo, señalando a las comunidades como responsables de cualquier ineficiencia. En un hábil movimiento centrífugo y centrípeto, distribuye los fracasos y se queda los aciertos. Todo ello sin apenas sonrojarse y en nombre de “el gobierno de España”.
- El señor Aragonés, si es elegido President de la Generalitat, ha de entender que su misión será administrar los recursos que le dejen administrar y poca cosa más.
- Ha de olvidarse de la “mesa del diálogo” que es como el “cuento de la lechera” en versión cañí.
- También ha de asumir que su forma de entender la independencia (versión “el día más largo”) no casa con la voluntad independentista de la sociedad civil, y que sus declaraciones en este sentido son pura retórica. Como lleva ya muchos años militando en Esquerra Republicana, le resultará fácil entenderlo, ya que su partido nunca ha hecho nada concreto para conseguir la independencia (aparte de repetir su sonsonete), en sus noventa años de existencia.
- Todo lo que se pueda hacer en favor de una República independiente se ha de hacer desde el exterior, sea a través del Consell per la República o por cualquier otra organización que no tenga que responder ante el Estado español.
- Él ha de gobernar la gestoría y seguir haciendo trámites. Son actuaciones a corto. Los planes a largo que suponen movimientos estratégicos hay que pensarlos e implementarlos fuera. Son funciones distintas realizadas por órganos distintos. Todo muy bien delimitado.
Si el señor Aragonés, sus muchachos y su padre espiritual no tienen en cuenta algunas de estas consideraciones, se equivocarán de lleno.
Yo recomendaría a Junts per Catalunya que dentro de un par de meses (no antes) apoye la candidatura de Pere Aragonés y acuerde con ERC un pacto “flexible” de legislatura, sin entrar en el gobierno. Será entonces cuando los “republicanos” aprenderán de verdad de qué va la película y dejarán en la sacristía las flores de lirio que acostumbran a llevar en la mano.
Porque sin el “contubernio independentista” del Consell per la República (como lo califica la insidiosa señora Eva Granados) y su extraordinario trabajo en el exterior, el ejército de ocupación habría abierto de nuevo la Modelo y resucitado a la Brigada Político Social.