– Ser espanyol i monàrquic és coherent.
– Allò que no és coherent és ser republicà i estar adscrit a un Estat d’un Imperi terminal.
– Espanyol: persona adscrita, con emoció o indiferència, a Espanya o Estat Espanyol.
– España o Nación española o Pueblo español o Estado español, es decir, la concreción del proyecto imperial de los soberanos de Castilla, explicitado en el primer artículo de la primera Constitución española, la de 1812, que dice: Artículo 1: La Nación española es la reunión de todos los españoles de ambos hemisferios.
Definición que liga el concepto de España a la idea de Imperio y en consecuencia, la Nación española o España subsistirá mientras sobreviva el Imperio que forjó Castilla o, para ser rigurosos, mientras sobreviva el Imperio que forjaron los soberanos (reyes, oligarquías o parlamentos) que eligieron Castilla como metrópoli de su imperio. De ese Imperio castellano, rebautizado español desde 1812, en la actualidad, independizadas ya las colonias de ultramar, solo restan los territorios de la antigua Corona de Aragón y los enclaves africanos de las Islas Canarias y las ciudades marroquís de Ceuta y Melilla. La relación con Navarra y Vasconia es ambigua, en apariencia de no dominio y basada en el pacto.
Aquest titular és patètic. El que caldria dir és “pobres espanyols que es consideren monàrquics”.
– Ser espanyol i monàrquic és coherent.
– Allò que no és coherent és ser republicà i estar adscrit a un Estat d’un Imperi terminal.
– Espanyol: persona adscrita, con emoció o indiferència, a Espanya o Estat Espanyol.
– España o Nación española o Pueblo español o Estado español, es decir, la concreción del proyecto imperial de los soberanos de Castilla, explicitado en el primer artículo de la primera Constitución española, la de 1812, que dice:
Artículo 1: La Nación española es la reunión de todos los españoles de ambos hemisferios.
Definición que liga el concepto de España a la idea de Imperio y en consecuencia, la Nación española o España subsistirá mientras sobreviva el Imperio que forjó Castilla o, para ser rigurosos, mientras sobreviva el Imperio que forjaron los soberanos (reyes, oligarquías o parlamentos) que eligieron Castilla como metrópoli de su imperio. De ese Imperio castellano, rebautizado español desde 1812, en la actualidad, independizadas ya las colonias de ultramar, solo restan los territorios de la antigua Corona de Aragón y los enclaves africanos de las Islas Canarias y las ciudades marroquís de Ceuta y Melilla. La relación con Navarra y Vasconia es ambigua, en apariencia de no dominio y basada en el pacto.