La Comunitat volverá a ser la autonomía peor financiada en 2014
La Comunitat recibirá 8.276 millones de euros el próximo año procedentes de la financiación autonómica que el Estado ingresa a las regiones para poder financiar sus servicios públicos. La cifra para el próximo ejercicio, que rebaja en 305 millones los datos de este año (el Gobierno transfirió 8.581 millones de euros en 2013) deja a la valenciana como la autonomía que menos dinero recibirá del Estado por habitante.
Según los datos que maneja la conselleria de Hacienda, en relación al resto de comunidades, la dirigida por Alberto Fabra se situará a la cola en financiación per cápita en 2014 (atendiendo a los últimos datos de población publicados por el Instituto Nacional de Estadística). En concreto, la Comunitat recibirá poco más de 1.615 euros por habitante, muy por debajo de los más de 2.015 que recibirá Cataluña o los 1.720 euros que recibirá Madrid. La media española, según los datos de Hacienda alcanzará el próximo año los 1.914 euros por habitante, por lo que la Comunitat se queda casi trescientos euros por debajo.
El dinero que recibirá la Generalitat por cada valenciano ya se contempla en los presupuestos autonómicos para 2014, presentados esta semana en Les Corts por el conseller de Hacienda, Juan Carlos Moragues. En concreto, las cuentas públicas para el próximo año se fundamentan en unos ingresos procedentes del actual modelo de financiación que ascienden hasta los 8.276 millones de euros. De ese total, 7.295 millones se obtienen de las entregas a cuenta por el porcentaje fijado de la recaudación de impuestos de cada territorio, y 981 son resultado de la liquidación de la financiación del año 2012, dato hecho público el pasado mes de julio. Así, la cifra para 2014 se reduce en 305 millones de euros. O lo que es lo mismo, un 3,5% menos de fondos para financiar partidas como Sanidad, Educación o Bienestar Social.
Los datos contrastan, un año más, con las cantidades que perciben otras comunidades, muy por encima de la media estatal. Es el caso de Cantabria, La Rioja o Extremadura, cuyos habitantes reciben casi 1.000 euros más que la media del resto de regiones. En el caso de Cantabria, según los datos de Hacienda, cada ciudadano de esa región recibirá 2.540 euros del sistema de financiación. Casi 927 euros más que un valenciano o 827 que un madrileño.
La cifra incide en la desproporción histórica que el Ejecutivo autonómico reitera casi a diario, como un mantra. Que la Comunitat está infrafinanciada pone de acuerdo a todas las fuerzas políticas de Les Corts y es una afirmación ratificada por cuantas comisiones técnicas, de expertos o parlamentarias se han celebrado hasta la fecha. El actual modelo de financiación agota su vida útil el 1 de enero de 2014, cuando debería entra en vigor el nuevo modelo en el que se actualicen los indicadores que determinan el importe que recibe cada comunidad.
Además, con el objetivo de señalar a las comunidades que más y menos aportan al Estado y más o menos reciben de él, el Ministerio de Hacienda ya ha anunciado que publicará las balanzas fiscales de las autonomías antes de final de año. La última vez que se hizo fue hace un lustro. Aunque la financiación autonómica es una pieza muy importante en este resultado matemático, no es la única. En todo caso, permite detectar las anomalías que se producen en las actuaciones del Estado, particularmente las referidas a una financiación inadecuada.
Las cifras llegarán en medio de una guerra abierta entre comunidades por las decisiones fiscales que todas las regiones está tomando par cuadrar su déficit y sus cuentas públicas, pero relajando en mayor medida el nivel de ajustes que han venido haciendo durante los pasados dos años. En concreto, esta semana el Gobierno de la Comunidad de Madrid, dirigido por el popular Ignacio González, anunció una ambiciosa bajada de impuestos con una reducción del tramo autonómico del IRPF y algunas otras deducciones fiscales. Poco después, el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, valoró la decisión de González y mostró su contrariedad por que algunas comunidades relajaran su presión fiscal «con el dinero de los valencianos». Fabra criticó que los valencianos tengan que hacer «un doble esfuerzo» para cumplir el objetivo de déficit, mientras otras regiones bajan impuestos. En cualquier caso, «cada uno sabe lo que tiene que hacer con arreglo a sus cuentas», recordó el presidente valenciano, que también ha previsto bonificaciones fiscales para el presupuesto de 2014, aunque más generales y de menor cuantía que las de su homólogo madrileño.
Pero, las palabras de Fabra no sentaron el jueves demasiado bien en Madrid, ya que el consejero de Economía madrileño, Enrique Ossorio, aseguró que «es evidente que Madrid es la comunidad que aporta más a las demás comunidades», por lo que «Valencia no puede quejarse en ese sentido». Desde Hacienda creen que las cifras de las balanzas fiscales demostrarán que esa afirmación es falsa.